El estado primitivo del invunche era un niño normal, quien fue regalado a los brujos para ser el portero guardián de sus cueva.
No habla solo emite sonidos guturales que asustan a los que los escuchan, anda completamente desnudo y se alimenta de carne humana que le dan los brujos.
A pesar de no ser iniciado en brujería ha adquirido una infinidad de conocimientos, por esto que aparte de cuidar la cueva aconseja a los brujos inexpertos.
Si alguien lo mira queda por siempre "enlesado"